Muchas veces nos confundimos cuando Jesús nació, pensamos que lo hizo con gran atractivo e influencia, pero en realidad no, el entorno en el que Él nació, fue bajo circunstancias muy deplorables, su entorno era contrario a su propósito.

Seguramente ese mismo día, nacieron más personas, pero probablemente fueron hijos de reyes que en ese entonces tenían todos los recursos necesarios. La manera en la que naciste y creciste, no determina lo que eres.

Jesucristo tenía situaciones adversas a Él, nació con escasez y oposición, literalmente nació en las mismas condiciones que los animales, en un pesebre, donde se alimentaban a las crías de los animales.

Independientemente de la manera en la que naciste y creciste, no determina lo que eres en el día de hoy. Desde nuestra cuna existe el rechazo, por parte de tu familia o la sociedad, pero nada determina en lo que tú te vas a convertir.

Tu propósito es lo que verdaderamente tiene valor, y todos tenemos un valor muy importante de parte de Dios, debes sanar el niño que llevas dentro, muchos de ustedes no han podido alcanzar su propósito y es por eso, porque no han podido sanar.

Quiero invitarte a las clases de Sanidad en la Iglesia de Georgia, con las herramientas que el Señor nos dio, ¡No esperes más!

ORACIÓN

Padre Celestial, en el nombre del Señor Jesucristo de Nazaret, hoy te damos las gracias por un día más de vida y permitirnos conocer más de tu palabra.

Hoy entendimos que nuestras condiciones no escriben nuestro propósito, a pesar de todas las adversidades, siempre tendremos un valor significativo para ti, Señor.

En el nombre de Jesucristo de Nazaret.

Amén y amén, ¡Bendiciones!