¿Cuál es el precio que le pones a tu propia vida? El Señor Jesucristo tenía una manera de medir el valor de las personas, pero lo que me llama la atención es, nos enseña cómo no medir a las personas.

Hoy en día las personas piensan que vales por lo que posees, es decir, medimos a las personas con base a lo que ellos tienen, si tienen mucho, pensamos que son personas que valen mucho y viceversa.

Pero lo más grave es sí tú mismo te valoras con este mismo método, si piensas que eres mucho porque tienes mucho dinero o viceversa, Lucas 12:15, 'La vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee'.

Tenemos que entender que hoy en día no podemos medirnos por lo que tenemos o poseemos, lamentablemente, algunas personas se han vendido muy barato para poder conseguir más, han apostado todo por alcanzar una meta económica.

Si eres de estas personas, quiero decirte que la avaricia te está controlando, hay personas que están dispuestas a vender o pisotear a su familia, con tal de alcanzar lo que ellos quieren. Amigos, la avaricia no se define por lo que las cosas cuestan, sino que se mide por lo que te cuestan a ti.

El Señor Jesucristo no hacía eso, porque la vida del hombre no consiste en la abundancia en los bienes que posee.

ORACIÓN

Padre Amado, en el nombre de Jesucristo hoy te doy las gracias por la oportunidad que nos has dado de estar aquí y conocer más de tu maravillosa palabra.

Nos enseñaste el verdadero valor de las personas, porque de lo contrario, solo los ricos tendrían más valor y los que no tienen nada, no sería nadie.

El Señor quita toda obstrucción mental a las personas que se miden a través de sus bienes o por lo que poseen.

En el nombre de Jesucristo de Nazaret.

Amén y amén, ¡Bendiciones!