Filipenses 1:12 (NTV) Además, mis amados hermanos, quiero que sepan que todo lo que me ha sucedido en este lugar ha servido para difundir la Buena Noticia.

Muchas veces, en las circunstancias que nos toca enfrentar en la vida, nos herimos e incluso nos llegamos a molestar cuando las cosas se salen de control; es muy normal que, cuando las cosas te salgan mal o no salgan como esperabas, empieces a ver la vida y tu futuro con dolor. 

Esto es algo que debes empezar a evitar en tu vida, aprendiendo cómo el apóstol Pablo lo hizo, él estaba en la cárcel encadenado, no tenía qué comer, estaba harapiento, y cualquier estando en esas condiciones, miraría la vida con dolor, maldecirá y diría que tiene mala suerte.

Pero eso no fue lo que hizo el apóstol Pablo, él aprendió a dejar de mirar con dolor, en su lugar, todas las cosas que le pasaban, las veía desde el lado bueno, estando en las peores condiciones escribió esto:  Filipenses 1:12-13 Además, mis amados hermanos, quiero que sepan que todo lo que me ha sucedido en este lugar ha servido para difundir la Buena Noticia.  Pues cada persona de aquí—incluida toda la guardia del palacio—sabe que estoy encadenado por causa de Cristo.

Es muy diferente la persona que mira con objetivo todo lo que le está pasando, no importa las condiciones tan deplorables en las que viva. Este es el objetivo de este Devocional, Dios obra cuando se nos abre las puertas, pero también cuando estás se nos cierran, si en este momento se te está cerrando una puerta, aprende a verla con un objetivo, no la veas a través del dolor.

Aprende a hacer lo que hizo el apóstol Pablo, en medio del encadenamiento o de su estómago vacío, nunca se quejó de alguna de esas situaciones, no miró a través del dolor, porque ya había aprendido a mirar con objetividad lo que le estaba sucediendo.

Dios está obrando en todas las situaciones que te están sucediendo en este momento, si tú, que me estás leyendo ahora mismo, y estás atravesando por una situación muy complicada, te invito a dejar de ver con dolor, es empezar a mirar con objetividad y entender cuál es la razón de lo que te está sucediendo.

ORACIÓN

Padre Celestial, queremos darte las gracias por la oportunidad que nos das de conectarnos a ti a través de tu palabra.

Tú no vas a permitir que ninguna persona en este momento se derrumbe o se desanime, no importa las situaciones que esté viviendo en esto momento, más bien tú los ayudarás a levantarse y a que no miren a través del dolor, les ayudarás a descubrir el lado positivo de lo que les toca afrontar.

En el nombre de Jesús.

Amén y amén.

¡Bendiciones!