Juan 10:17 (NTV) El Padre me ama, porque sacrifico mi vida para poder tomarla de nuevo.

Queridos, desde que el Señor Jesucristo nació y cuando creció, sabía cuál era su propósito, lo tenía muy claro, cuando tenía 12 años, la Biblia nos habla de su preadolescencia, nos muestra un pasaje, que narra cuando Él se encontraba en un templo, se les había perdido a sus padres, o a sus tutores, José y María, que lo cuidaban acá en la tierra.

Pero el Señor se les perdió, cuando Él estaba en el templo, escuchando la palabra de Dios, pare ese entonces, el Antiguo Testamento ya estaba escrito, fueron muchas las promesas que se escribieron de Él, desde antes que naciera.

Por ejemplo, Isaías, el profeta, 750 años antes de que Jesús naciera, dijo “un niño nos es nacido”, asegurando que nacería de una virgen.

Entonces, el Señor Jesucristo, desde los 12 años tiene muy claro su propósito, Él sabe dónde debe estar, tú no lo veías en el parque jugando, lo encuentras dentro del templo leyendo la Biblia.

Cuando Él llegó a los 30 años, creció y se formó como hombre, alineado a su propósito. El Señor les anunciaba a sus apóstoles dónde tenía que morir, dejando muy claro que nadie se la arrebataría, porque Él lo hacía voluntariamente porque ese era su propósito, porque el Padre le dijo así se haría.

Queridos amigos, cuando nosotros tenemos muy claro nuestro propósito, sabemos cuál es el siguiente paso que debemos dar, nos damos cuenta cuáles son las personas que debemos permitir que nos rodeen, cuando descubrimos nuestro propósito, tenemos muy claro hacía a donde vamos y qué es lo que queremos conseguir.

Cuando Jesucristo moría en la cruz, las personas llamaban ese suceso como querían, hasta el día de hoy, cualquier persona lo puede seguir haciendo, lo único que no pueden decir es que fue un accidente, porque no, queridos, eso fue todo menos un accidente, porque fue el propósito por el que Él venía, el Señor lo descubrió desde antes que naciera. Nadie le arrebató la vida, ni mucho menos fue un accidente, su muerte en la cruz, era parte de su propósito.

En lo personal, yo descubrí mi propósito desde los 23 años que estoy pastoreando esta maravillosa congregación que llamamos Iglesia de Georgia, Dios me escogió para orar por ellos y guiarlos conforme lo que está escrito en la Biblia. Llevo 17 años haciendo lo mismo.

Cualquier persona podría decir que soy un afortunado o que todo fue producto de la casualidad, yo sé que todos pueden decir lo que sea de mi labor y de toda mi trayectoria, pero nadie puede decir que es un accidente, es el propósito de Dios y yo tengo muy claro qué es lo que tengo que hacer, hoy sé que tengo que pastorear las ovejas del Señor.

Cuando descubres tu propósito, no es accidente las grandes bendiciones que te pasan, es la voluntad de dios sucediendo en tu vida, descúbrelo y disfrútalo.

ORACIÓN

Mi Dios, permítenos descubrir nuestro propósito lo más pronto posible y cuando lo hagamos, debemos tener muy claro que los demás no nos van a entender, pero nosotros debemos mantenernos firmes, no importa que digan que es una casualidad o un golpe de suerte, solamente Tú, sabes que es nuestro propósito.

En el nombre de Jesús.

Amén y amén.

¡Bendiciones!