Lucas 19:10 (NTV) Pues el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar a los que están perdidos.

Quiero empezar este devocional haciéndote una pregunta, ¿has sentido los pasos de Dios detrás de ti? ¿Has sentido como toca tu puerta y aparece en tu vida? Probablemente tú no eres consciente de esto, pero Él vino a buscarte, Él vino a encontrarse contigo.

Los seres humanos son especialistas en huir, alejarse, vivir distraídos y ocupados, pero en realidad, el Señor vino a buscar lo que se había perdido, Dios vino a encontrar lo que le pertenece y tú eres pertenecía de Él, eres su hijo, el Señor te ama de tal manera que fue capaz de entregar su propia vida con tal de entregar la tuya.

Fue capaz de perdonar y olvidar todos tus pecados, con tal de quitar todo lo que le alejaba de ti, Él resolvió todo lo que era necesario, porque había una justicia de condenación, porque tú merecías castigo, separación eterna y que no merecías estar cerca de Él y como Dios es tan justo y no podía sobornar a la justicia, tuvo que pagar el precio, viniendo a sufrir todos tus dolores, cargando todas nuestras consecuencias y clavando todo decreto de maldición.

Por esa razón Él tiene todo el derecho de decir, he venido a buscarte porque quiero estar contigo. ¿Tú has sentido a Dios? ¿Te has dado cuenta de cómo toca tu puerta? Muchas veces aparece después de un pensamiento matutino, en el abrazo de un hijo o en la mirada tierna de tu esposa, muchas ocasiones aparece a través de una persona que te asiste o te ayuda.

Dios aparece de mil maneras y una cosa sí es segura, Él está llevando una búsqueda constante para estar cerca de ti, una búsqueda en la cual no piensa o no escatima en todo lo que hay que invertir con tal de lograrlo y realizarlo, si ni siquiera lo pensó al entregar su vida, ahora nada le impedirá que este encuentro se realice.

Si tú has vivido distraído o muy ocupado y no has sido capaz de percibir esa búsqueda que está detrás de ti, debes hacer un alto en tu vida y reflexionar, debes entender, por ejemplo, porque en medio de ese accidente no moriste o porque no te perdiste en las drogas.

Debes entender que esa búsqueda constante no empezó hoy, fue desde que tú naciste, siempre estuvo detrás de ti, Él siempre ha estado en tu vida y siempre continuará con esta búsqueda, no importa si tienes 10, 30 o 60 años y jamás olvides que nada ni nadie lo detendrá o lo parará, no ignores todos los acercamientos que ha tenido contigo, recíbelos y hazlos parte de tu vida.

ORACIÓN

Padre Celestial, en el nombre de Jesús de Nazaret hoy quiero agradecerte por la oportunidad que nos das de la vida y por aprender más de Tú palabra.

Mi Dios, cuando Tú determinas buscarnos, mueves todo obstáculo y quitas todo impedimento hasta encontrar nuestro corazón y a veces en nuestras distracciones u ocupaciones no hemos sido conscientes de esa búsqueda y Tú siempre estás detrás de nosotros mandándonos señales, haciéndonos saber que ahí estás.

En el nombre de Jesús.

Amén y amén.

¡Bendiciones!