En el día de hoy, en el cristianismo actual y moderno algo que carece en las personas es el entendimiento de la presencia de Dios, es real y está llena de amor, toma lo que está roto y lo restaura.

La presencia de Dios le aporta el color a tu vida, la alegría a tu rostro, todo eso que el dinero, amistades, fama, etc. Lo que no te puede dar alguna cosa existente en la tierra, te lo da la presencia real de Dios, por ella, en cambio a todo lo demás su presencia no es terrenal, es celestial.

Cuando hablamos que la presencia de Dios es real, es algo que debemos de buscarla y traerla, podemos hacerlo en cualquier momento del día, que leamos por lo menos un versículo al día, Salmo 139: 7 - 9, '¿A dónde podría alejarme de tu Espíritu? ¿A dónde podría huir de tu presencia? Si subiera al cielo, allí estás tú; si tendiera mi lecho en el fondo del abismo, también estás allí’.

Cuando encuentras la presencia de Dios, todo es diferente, se abren tus puertas, todo es real, las personas quieren estar cerca de ti, quieren sumarse a tu equipo y ser parte de tu vida. Dios lo ha hecho a través de diferentes personas y podrá hacerlo contigo.

ORACIÓN 

Padre amado, en el nombre del Señor Jesucristo de Nazaret hoy te damos las gracias por un día más de vida y permitirnos aprender más de tu palabra.

Hoy entendimos que no podemos huir y alejarnos de tu presencia, así que permití que sea de corrección y darle color a nuestra vida, sin que se opaque, por lo que habita en nuestro corazón.

En el nombre de Jesucristo.

Amén y amén, ¡Bendiciones!